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LA DÉCIMA PUERTORRIQUEÑA

...un antiguo género expresivo, adoptado y adaptado por nuestro jíbaros cantores

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La base de la melodía y el ritmo de la música puertorriqueña de la montaña es el seis. Pero la base de su canto es la décima.

 

La décima completa se compone de cuatro estrofas (o cuartetas) de diez versos cada una. Cada verso se compone de siete, ocho o nueve sílabas y rima entre sí según reglas antiguas y complejas, lo que exige una formidable destreza artística del decimista.

El gran trovador repentista

puertorriqueño Ricardo Abril

      Articulos en esta sección:

Oigan a Isidro Fernández improvisar una décima al momento -
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Vicente Martínez de Espinel (1551?-1624)

Orígenes de la Décima

 

La original forma poética llamada décima fue revivida y revisada por Vicente Martínez de Espinel (1551?-1624),  poeta, novelista y músico español de Ronda, Andalucía. Su versión de la décima posteriormente es estimulada y promulgada por su estudiante, el gran poeta y dramaturgo español Lope de Vega (1562-1635). La forma se compone de versos de diez líneas y ocho sílabas--conocidas hoy en día como la décima espinela--y es la base de la canción tradicional puertorriqueña. 

 

Las tradiciones de la décima jíbara y su canto trovador pueden trazarse desde ese pasado lejano, como también a raíces medioevales españoles y moriscos. Originalmente, en Puerto Rico la décima era "asonantada", o sea de forma ruda que no seguía fielmente las reglas como Espinel las había establecido. Pero en los siglos entrantes los trovadores la perfeccionaron, y al buen trovador jíbaro se le exigía conocer todas las múltiples reglas tradicionales de la Décima a perfección y aplicarlas apasionadamente a su canto jíbaro.


    La décima fue traída a Puerto Rico y a los otros paises hispanoparlantes de las Américas originalmente por marineros, soldados y emigrantes españoles, donde fueron preservadas por la tradición oral, algunas veces en versiones que difieren de país en país. En algunos países se escriben y se leen; en otros se escriben y se leen y se cantan; en otros países (incluyendo a Puerto Rico) la décima se escribe, se lee, se canta y se improvisa.

Las distintas clases de decimistas

por el folklorista José Gumersindo Torres

El jíbaro curao y bragao que tiene a Borinquen en el corazón, lo expresa en su nativo cantar de la altura, a la vez que viste nuestro folklor de típico ropaje y conserva viva la llama del cantío puertorriqueño. Sigue regando el surco con lo que mi tierra produce, germina y siembra. En los Concursos de la Bacardi, del Instituto de Cultura, o en Festivales de la Décima, escuchamos al espinelista de pura cepa natural en el cantar indio-africano-español, tejer con su musa, prosa y numen, un tema selecto de su Pie Forzao.

Según los hay de la fina, tambien los hay de la gorda, y está el bardo, que conociendo el esquema de la poesía decimal puede improvisar uno o dos versos, basados en practica y experiencia sin ser necesariamente un improvisador natural. 

Por otro lado, existen cantaores que simplemente son rimadores de la décima. Utilizan la versación de palabras de fácil rima, pero, con un verso vacío, incongruente y sin mensaje alguno. Buscan rima de fácil acomodo como (-ar / -cantar), (-or / -trovador) o (-ción/ -lechón) para elaborar versos rabisecos.

Y como de que los hay, los hay, está el versador, aquel que en realidad canta versos aprendidos o embotellados, como decimos los jibaros. 

La flor y nata del buen trovador que acopla sus cantíos para redondear un verso cuadrado, sobresale en este campo fecundo decimal. El Improvisador que "fondea", continua versando, adornando y entonando con facilidad una cadena de versos con pensamientos completos, imágenes, similes y metáforas de su propia inspiración. A través de su cantares en conversación responde y hace preguntas al trovador adversario en forma poetica lírica, de florido lenguaje, sin caer en lo vulgar ni en la inopla.

Cómo perfeccionar una décima
Comentario por el Folklorista José G. Torres

  • El uso excesivo de diminutivos y aumentativos por el versador en la décima  es reflejo de pobre vocabulario y una manera fácil y mediocre de versar.

 

       Ejemplos: cuatrito-pueblito-lechoncito
                          cabezón-panderetazo-barrigón

 

       En la décima jocosa, humorística, a veces tiene cabida por nuestro uso puertorriqueno de dichos diminutivos. Pero el Improvisador culto y natural no abusa de los diminutivo ni aumentativos.
 

  • Palabras compuestas de uso excesiva es también una pésima señal de abusar la Espinela

    Ejemplo:  agradablemente-amigablemente-diligentemente-elegantemente

 

     Pudieran ser aceptado en contadas ocasiones, pero no en forma consecutiva ni abusiva en el Pie Forzado.
 

  • Es importante cuidarse de la palabra singular y del plural en los cantares del terruño amado, Singular con singular y Plural siempre con plural.
     

      Ejemplo: Singular El Gallo—Plural Los Gallos

  • Letras R y L: hay que vigilar las erres(r) y las eles(L) 

 

       Ejemplo: Rimar erróneamente (cantar con sitial) y (leal con versar)
 

  • El consabido verso asonante (o sea, que no es cuadrante) y que era aceptado por generaciones pasadas, ya no tiene cabida en los concursos de trovadores. En la rima de "canto en los barrancos" y "muero en el campo". "Barrancos" y "Campo" son versos asonantados.
     

  • En el esquema de la décima, el poeta cantor utiliza la primera cuarteta, o sea los primeros cuatros versos, como preámbulo a un pensamiento de apertura de su verso, redondeado en relación con su tema. El quinto y sexto verso sirven de enlaces para la conclusion final. Nuestro jibaro bardo entonces guarda la ultima cuarteta para completar con gracia y fineza su Pie Forzao.


EL CANTOR DE LA MONTAÑA 
Canto a carta cabal
Ramito específico
No nacerá en Puerto Rico
Señores otro igual
Con su voz tan natural
Y el sabor a dulce caña
La melodia se empaña
Su cantico se derrumba
Que escriban sobre su tumba
El Cantor de la Montana.

 

  • En la controversia o décima criolla picante, se enfrentan los improvisadores en un desafío decimal. El primero deja ver su intencion de acuerdo con el tema selecto y el otro bardo contrario tiene que responder con fineza y aplomo al desafio poetico.

RAMITO:
Oiga mi hermano querido
Cante buscando otro broche
Yo nunca he sido fantoche
Ni chata de nadie he sido
Sea usted mas precavido
Eche combustible al tanque
Imposible que atrabanque
Al Cantor de la Montana
Con la melodia o mana
Yo soy la ficha del tranque

MORALITO: 

Ramito por Dios lo siento 

Traigo versos a derroche 

Y como eres tan fantoche

Vengo a darte un escarmiento

Porque mi hermano presiento

Que no podras chantajearme

Ni tampoco ripostarme

Con mi verso bien medido

El pueblo sabe que has sido

La Chata de yo traquearme.

Moralito expone su tema e intencion picante en la primera cuarteta. Continua con los quinto y sexto versos de enlance y culmina con la cuarteta final el septimo verso hasta el decimo con su Pie Forzado o tema desafiante.

 

Ramito en su primera cuarteta da contestacion al desafio y luego de proseguir con los versos de enlance, utiliza la ultima cuarteta para exponer su defensa o tema escogido.

La Décima
Por Isidro Fernández 

El primer verso rimado
Con el cuarto y con el quinto.
El dos y el tres con distinto
Sonido se han combinado.
Seis y siete y pie forzado
Otra rima diferente.
El ocho crea el ambiente
Igualándose al noveno.
Así hace el poeta bueno
Una décima excelente. 

Con un buen vocabulario
Y divina inspiración
Juntando con gran pasión
Las flores del diccionario.
Con los vocablos que a diario
Usamos en cada tema,
La piedra se vuelve gema
Con metáforas y similes.
Usando formas disímiles
Para crear un poema.

Cuando la palabra llana
Es la que concluye el verso,
La métrica en su universo
Ocho sílabas hermana
La palabra aguda gana
Una sílaba al final
Cuando son siete en total.
Y en rima esdrújula, nueve
Una sílaba remueve 
La regla grammatical.

Las reglas de la poesía
Aplican los versadores,
Exaltando los valores
Del canto de serranía.
Muchas más cosas tendría
Que explicar este cantor.
Mas le dejo esta labor
Al que escucha interesado.
Una cosa he demostrado
No es fácil ser trovador.

Aqui se hace un instrumento
Del tronco de un guaraguao
Toca en el un seis chorreao
Un musico de talento.
El aguinaldo lamento
El cayeyano, cagueño
Milonga, seis fajardeno
La danza igual que un danzón.
Todos se interpretan con
El cuatro puertorriqueño

Cuando llega navidad 
Oigo la guitarra el guiro;
Con ellos canto y me inspiro 
Y me alegro en cantidad.
Pero es una realidad
No es un cuento ni es un sueño
Que el trovador borinqueño
Pierde la inspiración 
si no ve en la agrupación 
El cuatro puertorriqueño

Sobre el cuatro digo así
Es esencial e importante
Para todo aquel que cante
Nuestra música de aquí
La que en mi campo aprendí
Y sigo con mucho empeño
La canto desde pequeño
Pero yo nunca lo hacía
Si en el grupo no veía
El cuatro puertorriqueño

De los cuatristas que oí
Mencionar algunos quiero
Modesto, Nieves Quintero
Tony, Pascual y Ladí
Edwin, Rodolfo y Piní
Roque, Panchón y Cedeño 
Prodigio Claudio el Cagueño
Archilla y otros famosos
Han sido los virtuosos 
del cuatro puertorriqueño

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