top of page

Nace una vihuela-bordonúa

IN ENGLISH

El artesano instrumental puertorriqueño William Cumpiano fabrica en su taller de Northampton una recreación de una vihuela-bordonúa puertorriqueña , basada en las investigaciones del Proyecto del Cuatro, pero actualizado para el músico moderno.  La secuencia que sigue traza la construcción de este instrumento.

El instrumento original que sirvió de modelo para este originó de un tablón macizo de madera de siete pulgadas de grueso, del cual fue tallado el brazo y caja sonora en una pieza. Como el artesano Cumpiano no disponía de material seco de tal grosor, tuvo que crear un tablón de siete pulgadas como producto de tres tablones de cedro de tres pulgadas más un tablón de una pulgada encolados unos a otros. A la izquierda vemos los tres tablones juntos, uno encima del otro. Cada uno ha sido aserrados en una sierra sinfín a su derredor, al contorno apropiado de acuerdo con un plano derivado de las medidas provenientes de los ejemplares originales que se encuentran en Humacao y Yabucoa.

 

 

 

 

 

   

Se le remueve del fondo de la pieza con una sierra sinfín, una lámina de 1/4 pulgadas,  el cual se reservará para añadírsele luego como el fondo del instrumento. Después, el contenido interno del bloque se le remueve de la pieza con el sinfín y se extrae en una pieza, como se ve en la foto puesto a la izquierda del casco del instrumento. El proceso deja un corte vertical de entrada al interior en el cabo del instrumento, como se ve claramente en la fotografía. Ésta se cerrará luego con cola. La foto demuestra la cabecera ya añadida, contornada y taladrada para las clavijas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La rebanada del fondo, previamente reservado, se le junta al aro trasero de la pieza con cola, creando el fondo del casco. Ahora el artesano talla la unión del brazo y la caja armónica, creando el taco del instrumento. Usa cuchillos, raspas, formones y lija para duplicar el contorno del taco tal como los tacos observados en los instrumentos originales de Andrés Font y Candelario Vázquez. 
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Todas las superficies del instrumentos se raspan y lijan hasta quedar lisas y refinadas. El instrumento se apoya sobre una plataforma de madera llamado solera, la cual servirá luego de apoyar la tapa armónica mientras ésta se elabora.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Vista trasera del casco del instrumento. La esquina del perímetro del fondo del casco ha sido redondeada con una fresadora (router) para quitarle el filo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Vistos más de cerca, se pueden notar sobre el fondo dos boquetes localizados precisamente en la posición de dos 'almas' o postes que comenzarán inmediatamente debajo del diapasón y atraviesarán verticalmente la caja armónica. Estas dos "almas apoyarán el diapasón que flotará a una pequeña distancia encima de la tapa del instrumento, y serán fijadas al fondo por dos tornillitos que se introducirán por los dos boquetes.
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una delgada lámina de pino abeto ("pícea") será convertido en la tabla armónica (la "tapa") del instrumento. El pino abeto es un poco más fuerte y liviano que el más tradicional yagrumo, y por lo tanto sirve excelentemente como sustituto. En la foto se nota que la roseta ha sido introducido dentro de la tapa, la boca circular ha sido abierto y dos pequeños  boquetes han sido introducidos en la tapa, las cuales dejarán atravesar las los dos almas, o postes, que apoyarán el diapasón sobre el fondo. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Las vigas de refuerzo se pegan a la tapa. El artesano ha elegido incluir un abanico debajo del puente, como también dos placas de madera dura que ayudarán a que no se despegue el puente.
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Aquí vemos el diapasón, consistiendo de una lámina de ébano, en proceso de introducirle las ranuras que aceptarán el alambre de los trastes o notas. La distancia entre una y otra varía de acuerdo con una fórmula matemática antigua llamada la Regla Dieciocho--la que permite que la cuerda vibrante se achique en longitud de manera precisa para producir los intervalos musicales.
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La tabla armónica terminada se adjunta con pega al casco de la caja armónica y se fija mientras seca con una multitud de prensas de baja presión.
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

​

 

 

 

 

El diapasón queda pegado sobre el brazo luego que las dos almas se han insertado a través de los dos boquetitos en la tapa. El cabo inferior de cada alma o poste se fijan al fondo de la caja con tornillitos, y el cabo superior se fijan dentro de dos depresiones circulares debajo del diapason.
    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

​

 

Aquí vemos cómo el cabo final del diapasón queda levantado de la tapa y apoyado por las almas. Esto permite que la tapa vibre libremente sin ser restringido por el diapasón.

bottom of page